Los análisis a nivel mundial del gasto en salud de cada país son muy importantes para la planeación y las políticas públicas. La literatura ha mostrado que el desarrollo económico es un buen predictor del nivel de gasto per cápita en salud en los países, es decir, a mayor crecimiento del PIB, mayor gasto per capita en salud.
Para 2050, esta inequidad será mayor según las proyecciones, puesto que el 0,6% del gasto mundial en salud se realizará en países de ingreso bajo donde, según las proyecciones, vivirá el 15,7% de la población.
Motivados por esta mirada, en conjunto con un grupo de investigadores a nivel mundial, reunidos en el Grupo de Financiamiento de la Salud del estudio de Carga de la Enfermedad (Global Burden of Disease Health Financing Collaborator Network) caracterizamos el pasado, presente y futuro del gasto mundial en salud, enfatizando en la equidad.
Encontramos que en 2016 el 8,6% del PIB mundial se dedicó a salud, y que el crecimiento anual fue muy fuerte, aproximadamente un 4% en el periodo 1995-2016. La tasa más alta de crecimiento anual se observó en los países de ingreso medio superior (en América Latina en este grupo se encuentran países como Colombia, Costa Rica, Ecuador, Brasil y México), con un promedio de 5,5%. Las proyecciones indican que para 2050 el gasto en salud será igual al 9,4% del PIB mundial.
Desafortunadamente, otro hallazgo del estudio es que el gasto en salud a nivel global sigue siendo inequitativo: el 10% de la población vive en países de bajos ingresos, pero en estos países solo se gasta el 0,4% del dinero invertido en salud a nivel global. Para 2050, esta inequidad será mayor según las proyecciones, puesto que el 0,6% del gasto mundial en salud se realizará en países de ingreso bajo donde, según las proyecciones, vivirá el 15,7% de la población.
Adicionalmente, los gastos de bolsillo seguirán siendo la mayor fuente de financiación en países de bajos ingresos. Esto es una mala noticia, porque el gasto de bolsillo es la manera más ineficiente e inequitativa de financiar la salud.
En Latinoamérica, Uruguay y Colombia son los países con el gasto de bolsillo más bajo como porcentaje del total de las fuentes de financiación de los gastos totales en salud, con 17,2% y 20,6%, respectivamente. Los esfuerzos de los demás países de la región deben seguir apuntando a disminuir la carga financiera que recae sobre los hogares, aumentando la participación del gasto gubernamental y de los seguros prepagados privados para aquellos con capacidad de pago. De esta manera, será más factible cumplir con las metas de salud globales. Publicado en America Economía https://www.americaeconomia.com/analisis-opinion/presente-y-futuro-de-la-financiacion-mundial-de-la-salud