sábado, 13 de diciembre de 2008

Felicidad, Desarrollo y Crimen

(La Patria, Diciembre 15 de 2008)
La relación entre ingreso y felicidad es una de las preguntas centrales del análisis económico. La intuición nos dice que a mayor ingreso mayor satisfacción con la vida y por ende mayor felicidad. Pero desafortunadamente esta relación no ha podido ser comprobada. Estudio tras estudio muestra que esta conexión es débil.

Por ejemplo, de acuerdo con un nuevo informe del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), publicado en Noviembre de 2008, los ciudadanos de aquellos países que han experimentado un crecimiento económico acelerado en América Latina en años recientes se encuentran menos satisfechos con sus vidas que los ciudadanos que viven en países con tasas más bajas de crecimiento. Los niveles de satisfacción en Trinidad y Tobago, Chile, Perú y Ecuador —los países con mayores tasas de crecimiento en la región en los últimos años—, son inferiores a los de países como Guyana, El Salvador, Paraguay y Guatemala, cuyas economías evidenciaron poco o ningún crecimiento.

La explicación para este supuesto contrasentido, parece provenir, según el BID, de un cambio en las expectativas y el posicionamiento del individuo frente a su entorno. El crecimiento económico acelerado hace que las aspiraciones de las personas por un mejor estilo de vida crezcan aún más. Los cambios rápidos en la economía hacen que algunos obtengan mejores niveles de ingreso o consumo, y esto afecta los niveles de satisfacción de aquellos que aun no tienen el mismo ingreso o consumo.

El estudio del BID también muestra una relación contra intuitiva entre felicidad y crimen. América Latina registró en promedio un nivel de satisfacción de vida de 5.8, superior a Europa y Asia Central, pero inferior al 7.5 registrado en América del Norte y el 7.2 de Europa Occidental. Pero a la vez, las mismas encuestas muestran que el crimen es una preocupación central entre los latinoamericanos. De hecho, el sesenta por ciento de los entrevistados —el porcentaje más alto entre todas las regiones del mundo— no se sienten seguros de caminar a solas durante la noche.

La sicología, nos ofrece una excelente explicación a estos dilemas. Según el análisis presentado por Daniel Gilbert en su libro “Stumbling on Happiness”, el cerebro de los seres humanos viene programado para sintetizar la felicidad, esto es, los seres humanos tienen un sistema inmune sicológico que de manera subrepticia los hace cambiar la visión del mundo que les rodea, de tal manera que el individuo se sienta mejor en las condiciones en las que le toca vivir.

No cabe duda entonces de que los colombianos tenemos uno de los mejores sistemas inmune sicológico del mundo.

sábado, 29 de noviembre de 2008

Globalización financiera y desarrollo

(La Patria, Diciembre 9 2008)
La "Comisión sobre el Crecimiento y Desarrollo” sigue sorprendiendo a la comunidad académica internacional. Uno de sus más recientes análisis cuestiona la relación entre globalización financiera y crecimiento económico en los países en desarrollo. El autor de este documento es el economista Maurice Obstfeld, profesor de la Universidad de California en Berkeley y reconocido líder académico en el análisis de los mercados financieros a nivel mundial.

Obstfeld concluye en su documento qué a pesar de la abundancia de estudios empíricos, existe muy poca claridad respecto de los beneficios de la apertura financiera sobre los niveles de bienestar de las economías en desarrollo o sobre las tasas de crecimiento económico de estos mismos países. También concluye qué existe muy poca evidencia respecto de otro supuesto beneficio de las aperturas financieras: su efecto indirecto sobre el bienestar vía reforma a las instituciones económicas y a la política económica en general. Por el contrario, sugiere este autor, parecería que la apertura de la cuenta financiera de los países en desarrollo incrementa la frecuencia y severidad de las crisis económicas.

El análisis de Obstfeld no es, de manera alguna, un llamado a la nacionalización de la banca extranjera en los países en desarrollo o a exagerados controles a la entrada y salida de capitales. Es un llamado a los diseñadores de política financiera de los países en desarrollo a revisar el estado de su sistema financiero local. Encontrar las imperfecciones y las debilidades institucionales locales y corregirlas es imperativo para aprovechar las ventajas de la apertura financiera.

Sin embargo, el mismo Obstfeld reconoce qué este paso es quizá el más difícil. En los países en desarrollo escasean los recursos políticos necesarios para emprender una tarea de tal magnitud, de forma qué, siendo realistas, no todas las imperfecciones podrán ser corregidas en el mediano plazo. Así las cosas, el documento sugiere que hasta que no exista un claro listado de aquellos ajustes institucionales necesarios para que los países en desarrollo logren aprovecharse los beneficios de la globalización financiera, los procesos de apertura deben ser graduales y cautelosos. Es importante anotar aquí que a la banca colombiana no le ha ido muy bien cuando se le evalúa en términos de eficiencia y competencia.

Las conclusiones de Obstfeld se suman a una nueva ola de estudios internacionales que cuestionan seriamente las bondades de la globalización para los países en desarrollo. Es de aplaudir que los teóricos del desarrollo tengan el coraje de reconocer que sus teorías no funcionaron tal y como lo esperaban. En materia de teorías del desarrollo económico navegamos hacia un mundo diferente, donde la respuesta está en cada país, y no en Washington o en la facultad de Economía de alguna prestigiosa universidad.

jueves, 20 de noviembre de 2008

La imposibilidad de predecir

(La Patria, Diciembre 1 de 2008)
¿Por qué no fuimos alertados por los expertos?, ¿Que va a pasar según los expertos? Estas son las preguntas que cualquier lector del acontecer económico se hace cada vez que los medios mencionan la crisis económica. En los temas económicos, los medios nos presentan las opiniones de dos tipos de expertos: el académico y el empresario exitoso. Por falta de espacio, en esta columna solo expondré las tres principales debilidades del experto académico y las posibles razones por las que este tipo de experto falla repetidamente en sus proyecciones.

La primera razón y quizá la más importante es el efecto “Pensamiento Grupal”. Según esta teoría expuesta por el sicólogo Irving L. Janis en 1972, los expertos pertenecen por definición a un selecto grupo, se conocen entre todos, revisan entre si sus investigaciones, y trabajan o colaboran mutuamente todo el tiempo. Por ende su mayor preocupación es sostener su membrecía y posición en dicha elite. Esto genera incentivos a no desviarse mucho del pensamiento grupal, del consenso, so pena de perder su rol en el grupo. Es claro que con tal de no alejarse del consenso emergente en el grupo, aquellos que tienen ideas diferentes autocensuran sus dudas y limitan sus críticas hacia la posición dominante.

La segunda razón está en las fuentes de información a las que acuden los expertos. Es bien conocido en el mundo académico que las revistas especializadas favorecen la publicación de estudios que muestran resultados positivos y/o que se mueven alrededor del consenso. Los estudios que no encuentran resultados significativos, son raramente publicados. Como consecuencia la información disponible para los expertos es parcializada.

La tercera razón, y esto es cierto en todas las ciencias sociales, es la imposibilidad humana de predecir el futuro. La incertidumbre es la regla general y no la regla particular cuando se trata de hacer proyecciones. Los modelos estadísticos están alimentados de datos históricos y están basados fundamentalmente en el supuesto de que el futuro va a ser igual al pasado. Pero el futuro nos demuestra una y otra vez que es impredecible y que las consecuencias de hechos cuya probabilidad considerábamos casi nula son los que realmente determinan los cambios.

El experto académico en temas económicos no es más que un excelente historiador o documentador del pasado. Su valor esta en recoger información del pasado e interpretarla. Es cierto que el pasado da luces respecto de lo que puede ser el futuro pero su poder predictivo es más bajo de lo que suponíamos. Es importante entonces desmitificar las proyecciones de los expertos y entender que sus predicciones son meras opiniones, por más sofisticadas que estas parezcan.

miércoles, 22 de octubre de 2008

Dudas sobre la ayuda internacional

(La Patria, Octubre 27 de 2008)
Con la desaceleración económica mundial, se prevé una consecuente desaceleración del flujo de ayuda internacional a los países en desarrollo. La ayuda internacional es un concepto difuso en sí mismo. Y aunque a simple vista menos ayuda parece malas noticias, quizá no lo sea, especialmente para países en desarrollo como Colombia.

Cuanto es ayuda desinteresada y cuanto es simple política disfrazada de ayuda es difícil de estimar cuantitativamente Probablemente, el mejor esfuerzo por hacer esto es el de David Roodman, investigador del Centro para el Desarrollo Global. Roodman mide la ayuda internacional como una transferencia neta, y en sus cálculos ajusta hacia abajo la “ayuda” de ciertos países a otros cuando ésta se encuentra atada a condicionamientos, no apoya programas pro-pobre y se encuentra dispersa en muchos proyectos. Colombia, según este autor, recibía unos mil millones de dólares de ayuda neta en 2006, equivalente a un poco menos del 4% de las exportaciones de ese mismo año.

Según algunos académicos, la ayuda internacional puede hacer mas daño que bien. William Easterly, profesor de la Universidad de New York, sostiene que el actual sistema internacional de ayuda es nocivo porque está basado en la idea de que unos pocos “planeadores” pueden diseñar el programa perfecto para sacar a muchos de la pobreza.

Los planeadores sufren de varios problemas: basan sus decisiones en supuestos teóricos que no siempre corresponden con la realidad e incentivos que enfrentan los beneficiarios de sus programas, no reciben retroalimentación de los beneficiarios, no evalúan sus intervenciones rigurosamente, y como cualquier ser humano, no quieren perder sus empleos. En otras palabras, se convierte en una burocracia más. Easterly sugiere revisar el caso de países como India que han crecido sin mucha ayuda internacional, basados en emprendedores locales, no en planeadores centrales.

Otro problema fundamental de la ayuda internacional, está en las nocivas dinámicas políticas que esta puede generar. En general cuando dos grupos están en conflicto, político o armado, y un tercero entra a “ayudar” a uno de ellos, se generan incentivos para que el otro grupo, aquel que no recibe la ayuda radicalice aun más su posición, y/o, busque “ayuda” en otros lados. Ejemplos de cómo la ayuda internacional ha incentivado la violencia y la corrupción en países en desarrollo son el tema de un nuevo libro, “Economic Gangsters”, que ya está dando mucho de que hablar en los círculos académicos del desarrollo.

Ayudar tiene su ciencia. No es cuestión de dinero, o de romanticismos. Es un camino espinoso, que requiere mucho conocimiento y altas dosis de realismo. En ciertas ocasiones, irónicamente, la mejor ayuda es no ayudar.

lunes, 6 de octubre de 2008

Macroeconomía: mucho por aprender

(La Patria, Octubre 14 de 2008)
La crisis financiera de los EEUU ha dejado al descubierto una enorme discrepancia entre los analistas macroeconómicos. De un lado, los enemigos del famoso “salvamento”, argumentan alternativas de política dirigidas a reactivar la economía sin traicionar los principios del libre mercado. En pocas palabras, dejar que Wall Street resuelva su problema solo, y más bien intervenir directamente en el mercado inmobiliario o de crédito. Por otro lado, los amigos del “salvamento” sugieren que es irrelevante desgastarse en discutir, usando una buena metáfora, quien inicio el incendio, lo importante es apagarlo lo más pronto posible, antes de que se queme toda la economía.

Prominentes economistas de las más importantes escuelas de economía del mundo, se sitúan en ambos bandos. Paul Romer, distinguido economista y profesor de la Universidad de Stanford, lo resume como la lucha de los fundamentalistas y los realistas. De hecho el mismo Romer, después de analizar cuáles de sus colegas se encuentran en cuál bando, argumenta que esta nueva categoría es necesaria, puesto que en cada grupo es posible encontrar economistas antes catalogados como de izquierda y de derecha, o, pro-gobierno y anti-gobierno.

Para los fundamentalistas, las políticas públicas deben provenir de modelos. Las acciones tienen sentido si están respaldadas en un modelo matemático. Si la evidencia no se ajusta a sus modelos es excluida de cualquier consideración. Los realistas por su parte cuestionan las limitaciones de los modelos y sugieren la necesidad de complementarlos con “juicio clínico”, esto, en palabras de Romer es “la destilación de la evidencia que se acumula con la experiencia”.

Esta falta de consenso intelectual respecto del tema más crítico de todos: como evitar una gran depresión económica, es probablemente la deuda más grande de los macroeconomistas modernos con la sociedad contemporánea. La crisis actual ha sido ampliamente documentada. Abundan las descripciones pero faltan buenas explicaciones. Hasta hace unos meses, los macroeconomistas creían entender las crisis y como evitarlas. Hoy no sabemos.

El ciudadano del común no entiende y no está de acuerdo con el salvamento. Los expertos, por su parte, están de acuerdo en que el salvamento traiciona los principios del libre mercado, pero coinciden en que por malo que fuera, era necesario para recobrar la “confianza” en los mercados, sin embargo, reclaman mayor claridad intelectual respecto del mismo.

La macroeconomía y los macro economistas modernos están en deuda. Aun siendo cierto que algunos macroeconomistas habrán llamado la atención al respecto. Nouriel Roubini entre ellos. Tal parece que los demás no les hicieron eco. Se dejaron llevar por el miedo a asustar los mercados o por la falta de un buen modelo matemático. La crisis llego para quedarse y los macroeconomistas tendrán que reescribir sus textos. Aun tienen mucho por aprender.

jueves, 18 de septiembre de 2008

Wall Street y los principios del capitalismo

(La Patria, 22 de Septiembre de 2008)
Gracias a la caída de las firmas más importantes de corretaje de Wall Street, la humanidad asiste a la crisis histórico-económica más importante desde la gran depresión de 1931. Esto no es una exageración. El mismo Alan Greespan, quien durante su periodo como director de la Reserva Federal se negó a regular a Wall Street, reconoció que esta crisis es única.

Bien es sabido que de las crisis nacen las más importantes lecciones para los individuos y para los países que estos conforman. Y esta crisis, en particular, pone a prueba dos principios fundamentales del capitalismo moderno. Promovidos directamente por el gobierno de los EEUU y por las entidades internacionales que este controla, como el Banco Mundial y el FMI. Estos son: (1) la libre empresa trae consigo riesgos y beneficios, y los empresarios son responsables por ambos, por lo tanto no es papel del gobierno intervenir en decisiones privadas; (2) la inversión extranjera directa es buena para los países en un mundo globalizado.

Si las acciones de los EEUU para controlar la crisis violan estos dos principios, asistimos entonces a la redefinición del capitalismo moderno. De hecho, las voces al interior de los EEUU ya se escuchan. El New York Times asegura en su editorial de Septiembre 16 que “La nación necesita una nueva perspectiva respecto de los mercados, una que reconozca el carácter auto-destructivo del capitalismo sin riendas y su capacidad, no vigilada, de causar estragos más allá de Wall Street”.

Bajo el pretexto de que algunas firmas de Wall Street son “muy grandes para dejarlas caer” la Reserva Federal ha violado el primer principio. Lo peor es que lo ha hecho de manera selectiva, ha salvado a Bear Stearns, Fannie Mae, Freddie Mac y AIG, pero no a Lehman Brothers o a Merrill Lynch. Así las cosas, el principio numero uno ha sido violado, irónicamente por su más empecinado predicador.

Las cosas están por verse respecto del segundo principio. En teoría, en el libre mercado, el pez grande se come al pez chico. Esto es cuando las firmas no pueden existir en el mercado, o bien desaparecen o bien son simplemente compradas por otros. Y en una economía globalizada, esto puede significar que grandes compañías norteamericanas sean compradas por inversionistas de otros países, sean europeos, rusos, chinos, indios, musulmanes, venezolanos o africanos.

Las reglas de juego del capitalismo moderno están en juego, si el mayor jugador del mundo las respeta esto fortalecerá el sistema de mercado como modelo de crecimiento económico. Uno basado en la democracia y la libertad individual. Si no, los EEUU nos recordara una vez más que su principio es la doble moral: “Haz las cosas como yo te digo, no como yo las hago”.

lunes, 15 de septiembre de 2008

Presidentes de portada

Diversos analistas internacionales y algunos locales coinciden en sugerir que las elecciones en los EEUU no serán determinadas por el estado de la economía, la guerra, o los costos de la salud, sino por el marketing político. En un rincón estará McCain denunciando a Obama por ser un elitista (Abogado de Harvard) que no se encuentra conectado con el trabajador de carne y hueso. Y en el otro, Obama denunciando a un McCain demasiado viejo para gobernar y cuya promesa es seguir el legado de Bush.

Dos elementos distinguen las guerras de marketing político, el primero es la irrelevancia de la materia y la segunda es la reverencia por el empaque. El fin último de la publicidad es informar acerca de las cualidades de un producto y atraer a los consumidores. En este caso cada candidato y su vicepresidente son el producto, y los consumidores son millones de ciudadanos desentendidos y desinformados.

Es claro que los buenos estrategas de la publicidad y los medios son unos genios. Sus campañas logran modificar el comportamiento de millones de personas a diario. Todos estamos llenos de cosas que no necesitamos. Y a menudo sentimos el impulso de comprar algo y cuando por fin lo tenemos, no tardamos mucho en descubrir que sus cualidades y la cantidad de satisfacción que supuestamente nos iba a proveer han desaparecido.

Si esta descripción es adecuada, es claro que el sistema de elegir un presidente por votación popular está en peligro. Los procesos de selección al interior de cada partido darán cada vez más peso a las cualidades de venta de su candidato y no a su idoneidad y criterio para dirigir el poder ejecutivo de un país. La selección de un candidato será en adelante no muy distinta a cualquier “reality” show.

Es irónico que esta tendencia crezca en momentos en los cuales existe más información. Pero quizá esta sea la razón de este fenómeno creciente. El gran aporte de la explosión de la sociedad de la información y las comunicaciones a la democracia es la frivolización de la misma.

La complejidad de los problemas públicos requiere especialistas en cada tema. Algo que ningún candidato puede ser. E incluso requiere algo más, la honestidad de reconocer que no existen respuestas definitivas. Que el cuerpo de conocimiento de los seres humanos en muchos campos es limitado. Esto sin embargo no es un buen argumento de venta en ninguna campaña. Decir mucho y no decir nada es la esencia del marketing político.

Es una lástima que nuestras democracias no nos permitan elegir ministros en lugar de presidentes, quizá de esta manera podríamos recobrar el interés de los ciudadanos en temas particulares de política y disminuir el poder de influencia de los estrategas políticos. Mientras tanto seguiremos asistiendo al triste espectáculo de elegir presidentes de portada y entregar cada vez más poder a los grupos económicos para que sigan legislando a su conveniencia.

martes, 26 de agosto de 2008

Ojo con el mercado de vivienda

(La Patria, 1 de Septiembre de 2008)
Mientras la economía norteamericana tambalea como consecuencia de la crisis en el mercado inmobiliario y el incremento en precios de bienes básicos como la gasolina, algunas cifras parecen indicar que algo similar está ocurriendo en el país. En efecto, las burbujas especulativas en el mercado inmobiliario tienen devastadoras consecuencias inmediatas y de mediano plazo para los habitantes de un país.

La primera de ellas es la destrucción del patrimonio familiar. Hoy por hoy se estima que dentro de las personas que compraron casa en los últimos cinco años en los EEUU, uno de cada tres debe más en su hipoteca de lo que vale su casa. La segunda, a nivel macro, es la restricción dramática en el crédito y por ende en la inversión.

La crisis se desata cuando la gente deja de pagar sus cuotas hipotecarias. Esto sucede o bien por una reducción en la actividad económica que genera desempleo o bien por un exagerado aumento en las tasas de interés que redunda en mayores pagos mensuales. Pero en realidad las crisis se originan en mercados inmobiliarios distorsionados. Esto es, la combinación de precios al alza por un tiempo considerable y un sistema financiero dispuesto a financiar a casi cualquiera que lo desee. Cuando los precios al alza no reflejan escases, su verdadero significado es especulación.

Repasemos las cifras. Primero, el crédito. A marzo de 2008, según el DANE, el valor de créditos entregados para compra de vivienda (nueva y usada) había crecido en un 220% respecto del mismo periodo de 2006. Este crecimiento es similar tanto para la cifra trimestral como para la del acumulado de doce meses.

Segundo, los precios de la vivienda nueva. Según el mismo DANE, a marzo de 2008 el valor del metro cuadrado con destino a apartamentos y casas, promedio anual, creció 13.8% y 10.9%, respectivamente. Con cifras tan alarmantes como Cali con 24.71% o Bucaramanga con 13.05% en promedio para todas sus respectivas áreas metropolitanas. Estas cifras de crecimiento en los precios no deben sorprender, de hecho durante todo 2007 los precios de la vivienda nueva crecieron a tasas superiores.

Ahora bien, el incremento en los precios de la vivienda no parece estar atado a costos al alza en los materiales de construcción. En los últimos doce meses el Índice de Costos de la Construcción de Vivienda a julio de 2008, registró una variación del 7,13%. Este resultado es inferior en 0,39 puntos con relación al crecimiento acumulado del índice de precios al consumidor a julio de 2008 (7,52%).

Como explicar este dinamismo en el mercado inmobiliario sin un correspondiente boom de empleo o una drástica reducción de la pobreza? Bien sabido es que el gran lunar del crecimiento económico de los últimos años ha sido su sesgo anti-empleo. Peor aún las perspectivas de mediano plazo no son favorables para este mercado: tasas de crecimiento económico más bajas gracias a la desaceleración mundial y una creciente presión inflacionaria que será seguramente atacada con alzas en tasas de interés.

Comprar vivienda nueva en condiciones o precios que no corresponden a la realidad económica de una familia, no es una gran inversión, por el contrario es el camino más seguro hacia la pobreza.

lunes, 18 de agosto de 2008

Regulación vs Capital Social

(La Patria, 25 de Agosto de 2008; El Mundo, Octubre 29 de 2008)
En esta época de batallas de “desconfianza” institucional entre el poder ejecutivo y el poder judicial, bien vale la pena reflexionar sobre los orígenes y los posibles efectos de este tipo de situaciones sobre nuestra sociedad y economía en general.

Un estudio reciente, catalogado, por lo demás, como uno de los mejores en lo que va corrido de 2008, elaborado por Philippe Aghion, Yann Algan, Pierre Cahuc y Andrei Shleifer (economistas de Harvard, la Escuela de Economía de París y la Escuela Politécnica CREST en Francia, respectivamente), encuentra una estrecha relación negativa entre regulación gubernamental y capital social.

Los países en los que las personas desconfían más de sus conciudadanos son aquellos en los que existen más controles y regulaciones. Por que? Los autores sugieren la existencia de dos tipos de dinámicas en una sociedad. Una en la cual la gente invierte en construir redes de confianza con los demás porque descubren que esto los hace más productivos y más cívicos, y otra, en la que los individuos deciden no invertir en capital social, haciéndose menos productivos y más problemáticos los unos para los otros.

Como fruto de la desconfianza las sociedades con bajo capital social deciden resolver sus problemas con más reglas en lugar de invertir en recuperar el capital social perdido. La regulación es a su vez encargada a líderes gubernamentales dotados de bajo capital social quienes bajo esta cultura y mandato de la desconfianza crean instituciones regulatorias que a su vez ratifican y amplifican la desconfianza.

Las instituciones regulatorias, por todos conocidas popularmente como “trabas burocráticas”, se convierten en impedimentos para el flujo de ideas, la innovación y la productividad de los individuos. Peor aún, esta cultura termina por permear al ciudadano de a pie. Con el tiempo los padres de familia y líderes comunitarios pierden el incentivo a invertir en el capital social de sus hijos y comunidades, transmitiendo el valor del respeto (o miedo a) por la autoridad por encima de los valores de la responsabilidad y el respeto por los demás.

Las sociedades convergen así a equilibrios perversos, dedicando inmensas cantidades de recursos físicos, financieros y humanos a cazar al tramposo y a castigarlo. Olvidando que el “tramposo” no nace, sino que se hace. Una solución obvia se encuentra entonces en recuperar el capital social invirtiendo en educación pública de alta calidad.

Si estos autores están en lo cierto, el choque entre los poderes le hace un flaco favor a nuestro capital social como país y a las posibilidades de nuestra economía de crecer en el largo plazo. Las trabas burocráticas detienen la innovación, la verdadera máquina detrás del desarrollo.

jueves, 14 de agosto de 2008

McCain TV Ad "Broken" transcript

Politicians are willing to say anything in order to get your vote...

"Washington is broken
John McCain knows it
We're worse off than we were four years ago
Only McCain has taken on big tobacco, drug companies, fought corruption in both parties
He'll reform Wall Street, battle big oil, make America prosperous again
He's the original Maverick
One is ready to lead
I am John McCain and I approved this message"
(POSTED 08.05.08 by the Campaign)

miércoles, 6 de agosto de 2008

Autodiscriminación en el mercado laboral

(La Patria, Agosto 19 de 2008)
Uno de los temas de mayor controversia en el análisis socio económico de los mercados laborales es sin duda la existencia de discriminación hacia las mujeres. Un buen número de estudios sostienen qué existe diferencial salarial o de representación entre hombres y mujeres, especialmente en niveles medios y altos de las empresas y de las instituciones públicas, y qué este no es explicado por diferencias observables en términos de nivel educativo, horas trabajadas, y experiencia. En palabras simples, la discriminación consiste en que ante dos candidatos con iguales calificaciones pero de diferente sexo, la probabilidad de que el escogido sea un hombre es mayor.

Este tipo de evidencia ha servido de base para que se establezcan políticas públicas dirigidas a contrarrestar tal discriminación con leyes qué, por ejemplo, establecen la necesidad de tener un porcentaje mínimo de mujeres en ciertos niveles al interior de instituciones públicas, o la posibilidad de que una mujer pueda demandar legalmente a una entidad por no haber sido contratada o ascendida si puede demostrar que la decisión obedeció al hecho de ser mujer.

La discriminación, sin embargo, puede no ser externa sino interna. Esta conclusión, aun preliminar, proviene de nuevos estudios en el área de la economía experimental. Muriel Niederle y Alexandra Yestrumskas, investigadoras de Stanford y Harvard, respectivamente, sugieren la existencia de diferencias entre hombres y mujeres respecto de sus preferencias por trabajos con mayores retos e incertidumbre. A igual nivel de habilidad, parece ser que las mujeres se abstienen más que los hombres de elegir o aplicar a trabajos asociados con retos o riesgos desconocidos.

Las investigadoras encuentran que este diferencial en preferencias está asociado a diferencias en la autopercepción que hombres y mujeres tienen de su habilidad para trabajar en ambientes nuevos y con mayores retos, y en diferencias en actitudes respecto al riesgo y la incertidumbre en general. El estudio encuentra que mientras los hombres atribuyen con más frecuencia el fracaso en una tarea específica a la mala suerte y el éxito a su habilidad, las mujeres atribuyen con más frecuencia el fracaso en una tarea laboral a su habilidad y el éxito a la buena suerte.

Estos resultados amplían el rango de causas asociadas a los diferenciales salariales y de representación entre hombres y mujeres observados en el mercado laboral. Y cuestionan de manera importante el diseño de política pública en esta materia. Las autoras sugieren qué para evitar que mujeres con altas habilidades laborales se autodiscriminen, deben crearse normas sociales laborales según las cuales las mujeres puedan tratar diferentes tareas sin un compromiso inicial muy estricto. De esta manera las mujeres podrán valorar in situ su habilidad y eliminar o ratificar sus prejuicios iníciales respecto de su capacidad para ejecutar dicha tarea.

lunes, 4 de agosto de 2008

Obesidad: Prohibir, regular o informar

La literatura médica nos informa que la obesidad aumenta el riesgo de desarrollar múltiples complicaciones, entre las cuales están: la hipertensión arterial; la diabetes tipo II; las enfermedades coronarias; y los cánceres de próstata, colon, endometrio y seno. La obesidad también ha sido asociada con dificultades del sueño, infertilidad y complicaciones en el embarazo. El mensaje es claro, la obesidad es un problema de salud pública.

Ante este escenario, algunos gobiernos locales, especialmente en países donde la incidencia del problema es mayor, empiezan a tomar acciones. El menú de medidas consiste en prohibir, regular, informar o cualquier combinación de las anteriores. Por ejemplo Nueva York y Boston ya prohibieron el uso de grasas insaturadas en los restaurantes. Similarmente San Francisco y Nueva York ahora exigen a las cadenas de comidas rápidas informar sobre el contenido calórico de sus productos.

No obstante la creatividad gubernamental amenaza con crecer en alcance. California acaba de prohibir el uso de de grasas insaturadas en todos los productos horneados que se vendan en el Estado. Y ahora, Los Ángeles está considerando una ley para prohibir la apertura de nuevos restaurantes de comidas rápidas en un perímetro de 50 kilómetros a la redonda de su jurisdicción.

El problema de la obesidad ejemplifica de manera perfecta las dos preguntas más relevantes para cualquier gobierno local. Debe intervenir? Y si esto es así, Cómo? Opino que las respuestas son “Si” e “Informando”.

Si la historia nos enseña algo, hemos aprendido que las políticas basadas en prohibir y regular, fracasan frecuentemente. Ante las prohibiciones la respuesta optima de los consumidores y los productores es la creación de mercados negros, los cuales aumentan los riesgos para ambos participantes en el mercado y los costos de hacer cumplir la ley. Los códigos regulatorios por su parte son escenarios perfectos para la ambivalencia, situación que es siempre hábilmente utilizada por aquellos que saben jugar al borde de los estatutos.

La información por su parte, sí es efectiva, puede generar el cambio de comportamiento deseado en los individuos, el fin último de la política pública. La información debe desincentivar la demanda por ciertos productos y llevarlos a que desaparezcan del mercado, sin necesidad de prohibirlos o regularlos. Las políticas basadas en informar a los ciudadanos sobre riesgos asociados a ciertos productos son además consistentes con el principio según el cual los individuos deben ser soberanos y responsables por sus propias decisiones. De otro modo, en concordancia con prohibir las grasas insaturadas, deberían prohibirse o regularse también los azúcares, los televisores, internet y los trabajos sedentarios, otras causas comprobadas de obesidad.

jueves, 24 de julio de 2008

Biocombustibles: una mala idea

(La Patria, 28 de Julio)
El Presidente del Banco Mundial denomina la actual crisis en los precios de los alimentos como “un problema inventado por el hombre”. Tres factores se identifican como las causas. Por una parte están los precios de los combustibles, los cuales con su crecimiento sostenido de los dos últimos años han incrementado los costos de la agricultura. Por otra, esta la caída en inventarios gracias a sequias inesperadas en algunos países. Y por último, la reasignación de tierras y productos agrícolas para la producción de biocombustibles, maíz especialmente.

Recientemente Will Martin, economista sénior del Banco Mundial, estudio la contribución de cada uno de estos factores al incremento en los precios de los alimentos. Martin encontró que la demanda por alimentos en los países en desarrollo no ha cambiado sustancialmente, y que la contribución de los cambios climáticos ha sido baja. Según este mismo analista, lo que definitivamente ha sido un cambio fundamental en el mercado es el crecimiento del uso de productos agrícolas en la producción de combustibles.

Las consecuencias de altos precios en los alimentos son devastadoras. De acuerdo con el mismo Banco, 41 países han perdido entre 3% y 10% de su PIB en los últimos 18 meses. Además, esta entidad estima que 100 millones de personas han caído en la pobreza en los dos últimos años, engrosando los más de 2 billones de habitantes del planeta que viven en tal situación. Los niños son grandes perjudicados también, alrededor de 3.5 millones mueren anualmente por causa de malnutrición, y los que sobreviven sufrirán múltiples problemas de salud física y mental por el resto de sus vidas. Todo esto está documentado científicamente.

Los biocombustibles, de acuerdo a estas cifras, no resisten entonces el más mínimo y simple análisis costo beneficio desde la perspectiva de la sociedad mundial. Sus supuestos beneficios en términos de disminución del calentamiento global han sido cuestionados, no solo por su mínima contribución en cada galón de gasolina, sino por los bosques que han sido destruidos para dar paso a nuevas plantaciones.

La afirmación del Banco Mundial tiene gran sentido. Los biocombustibles son el más reciente invento de la humanidad con consecuencias nefastas para sí misma. Un invento que nació gracias a la letal combinación de la presión de grupos de interés por subsidios gubernamentales y a la creación de mercados inexistentes. Según la OECD la industria de biocombustibles depende intensivamente de subsidios públicos para su existencia, 11 billones de dólares en 2006 y 25 billones proyectados a 2015.

Los biocombustibles son un ejemplo más de porque los gobiernos no deben subsidiar productos específicos, los mercados saben hacerlo de manera más eficiente. (El reporte de la OECD se encuentra en http://www.oecd.org/dataoecd/19/62/41007840.pdf)

lunes, 7 de julio de 2008

Legalización inesperada

(La Patria, Julio 14 de 2008)
Alejandro Gaviria escribía hace poco en su columna qué “Dentro del orden económico mundial, Colombia se ha especializado en la estimulación y el entretenimiento químico de las clases medias del primer mundo, bien sea en la forma de cocaína, de cafeína o de ambas.” En este orden de ideas, las tendencias mas recientes del mercado norteamericano en términos de demanda por “entretenimiento químico” pueden darnos luces acerca del futuro de este indeseable renglón en nuestras exportaciones.

Mucho se habla de la legalización como única solución al principal problema de Colombia. Una vez legalizadas las rentas deberían acabarse gran parte de nuestros problemas, asumiendo que el dinero del narcotráfico financia la mayor parte de las actividades criminales desestabilizadoras del país. Si esto es así, parece avecinarse una “legalización” inesperada del problema en el sentido amplio de la palabra.

La Comisión de Examinadores Médicos de la Florida acaba de publicar su análisis de autopsias de 2007 y en éste encuentra que la tasa de muertes causada por abuso de drogas legales, aquellas que se producen en laboratorios médicos y de venta en farmacias, es tres veces más alta que la asociada a todas las drogas ilegales combinadas.

Esta cifra no es aislada o nueva. De acuerdo con el Instituto Nacional de Abuso de Drogas de los EEUU y la DEA, el abuso de este tipo de medicinas presenta una tendencia creciente en Norteamérica. Cerca de siete millones de norteamericanos están abusando de estas, un incremento de ochenta por ciento en los últimos seis años.

Las drogas licitas de mayor abuso son los supresores de dolor, las medicinas para deprimir el sistema nervioso central recetadas para tratar la ansiedad y desordenes en el sueño, y los estimulantes, usados igualmente para tratar la narcolepsia y problemas de déficit de atención por hiperactividad.

Según edades, los mayores problemas se presentan en personas mayores de 65 años, pero la tendencia es más preocupante en jóvenes. Por ejemplo, en 2006, 2.7% de niños de octavo grado, 7.2% de décimo grado y 9.6% de aquellos en doceavo grado habían abusado de alguna de estas medicinas en el año inmediatamente anterior.

Los estudios en esta materia son aun escasos. Las razones que explican el crecimiento de esta nueva demanda por drogas licitas parecen estar asociadas con la aparente “seguridad” que estas ofrecen. Esta seguridad, en la mente de los consumidores, es entendida de dos maneras. Uno, son medicinas que fueron recetadas previamente por un medico. Dos, evitan los riesgos asociados a comprar drogas en la calle. Adicionalmente el acceso a estas drogas es fácil usando farmacias virtuales. Para los mas chicos el acceso esta en los gabinetes de sus padres o familiares.

Es difícil prever que tan poderoso sea este efecto substitución en la demanda por “entretenimiento químico” pero al menos la buena noticia es que le esta llegando fuerte competencia a nuestro indeseable primer producto de exportación.

viernes, 27 de junio de 2008

Flexiguridad

(La Patria, Julio 1 de 2008)
Dinamarca es el mejor ejemplo a nivel mundial de la posible coexistencia en un mismo país de dos sistemas aparentemente antagónicos. La retórica de los partidos políticos usualmente nos invita a escoger entre una falsa dicotomía: mas mercados menos gobierno o viceversa. La aparente realidad es que no existe tal contradicción. Los intereses económicos y fundamentalismos ideológicos propios de nuestros lideres pasados y presentes nos han obligado a escoger allí donde no necesitábamos escoger.

Los resultados económicos y sociales de Dinamarca son sorprendentes. En lo económico: tercero en competitividad a nivel mundial, mercados financieros claros y transparentes, bajas barreras a las importaciones, altas exportaciones, tasa de desempleo de 2.8%. En lo social: Seguro de salud universal, generoso seguro de desempleo, guarderías publicas, educación universitaria gratis, sistema de pensiones publico, y uno de los mejores sistemas de reentrenamiento de trabajadores del mundo. Dinamarca es ademas el pais con el indice mas alto de "Felicidad", de acuerdo con el Estudio de Valores Mundiales de 2008 de la Universidad de Michigan.

Los daneses no son especialmente más inteligentes que el resto de la humanidad. Que explica entonces su éxito? Robert Kuttner ofrece una posible respuesta en su articulo "El Consenso de Copenhagen" publicado en la revista Foreign Affairs de Abril. La respuesta esta en los mercados laborales. La estrategia danesa se llama: Flexiguridad. Flexibilidad en los mercados laborales y fortaleza en el sistema de seguridad social.

La flexibilidad en los mercados laborales significa bajos costos de contrato y de despido. Para ser competitivo, cualquier empresario (grande, mediano o pequeño) necesita recurrir a mano de obra calificada y no calificada en cantidades variables. Con la tranquilidad de contratar y despedir sin mas complicaciones que un previo aviso. Esto aparentemente deja a los empleados a merced de los deseos de los empresarios. Pero en la economía danesa, perder o dejar el empleo no es una tragedia. Significa pasar a una nueva etapa en la cual dada la cobertura del sistema de seguridad social, el trabajador pasa a re-entrenarse sin perdida de ingreso o acceso a salud y otros beneficios por un tiempo moderado.

Cinco características definen el modelo: la inexistencia de desempleo, los sindicatos son vistos como aliados y no como enemigos por parte de los empleadores, existen salarios similares entre sectores económicos, existe un sistema de seguridad social con altos beneficios, y existe un agresivo y costoso conjunto de programas públicos dedicados a asistir y re-entrenar a los desempleados.

La Flexiguridad no se consigue gratis, ni tampoco de la noche a la mañana. Los daneses pagan los impuestos más altos del mundo después de Suecia. Además las raíces del modelo datan desde 1899.

Puede Colombia soñar con un sistema como el Danes. Probablemente no. Nuestra democracia y economía esta demasiado influenciada por los mercaderes del miedo y los buscadores de rentas públicas. Sin embargo es bueno saber que el capitalismo y la seguridad social no son antagonistas, de hecho pueden ser los mejores aliados.

viernes, 13 de junio de 2008

El Reporte Spence

(La Patria, Lunes 23 de Junio, 2008)
El pasado 21 de Mayo se presentaron en Londres las conclusiones de la “Comision sobre Crecimiento y Desarrollo”. La Comisión es el resultado de dos años de trabajo sobre las necesidades para un crecimiento sostenido e integrador en los países en vías de desarrollo. Estuvo conformada por 19 líderes con alta experiencia en el diseño y manejo de políticas públicas y dos economistas galardonados con el premio Nobel (Michael Spence y Robert Solow). Este trabajo fue financiado por los Gobiernos de Australia, Suecia, Países Bajos y Reino Unidos, la Fundación William y Flora Hewlett y el Grupo del Banco Mundial.

El informe Spence será de ahora en adelante la nueva cartilla del desarrollo, desplazando así los postulados de “El Consenso de Washington”, la cartilla reinante por mucho tiempo y cuyos escasos frutos en materia de crecimiento y reducción de pobreza son evidentes. Veamos cuales serán los nuevos postulados del desarrollo:

1. Sin crecimiento no hay reducción de pobreza
2. El crecimiento supone un reto a largo plazo que requiere liderazgo, perseverancia, resistencia, pragmatismo, transparencia y el respaldo de la población.
3. Se necesita un compromiso con la economía global para importar conocimientos y tecnologías, acceder a los mercados y generar un sólido sector de exportación
4. Se deben compartir las ventajas de la globalización, proporcionar acceso a los desfavorecidos y tratar los problemas de integración de sexos
5. Resalta la importancia de la nutrición de bebés y niños para evitar alteraciones a largo plazo en la adquisición de habilidades cognitivas y no cognitivas.
6. La mano de obra debe ser móvil. Y aboga por un mejor entendimiento y manejo de los procesos migratorios a nivel mundial.
7. Los mercados laborales deber ser flexibles. Debe permitirse a las industrias centradas en la exportación contratar trabajadores en condiciones más fáciles que las que predominan en el sector formal pero con la misma protección del trabajador básica en las áreas de salud y seguridad, horarios de trabajo y trabajo infantil.
8. La inversión como porcentaje del PIB debe ser al menos 25%.
9. Debe dejarse de malgastar dinero público subsidiando el consumo energético en los países en vías de desarrollo, siendo mejor invertir los recursos en educación e infraestructura.

Por último, el informe contradiciendo la vieja cartilla reconoce que los países no son homogéneos y que un conjunto de políticas no tiene por qué funcionar en todas partes igual. De tal forma que ahora los países no podrán culpar a ninguna institución multilateral por su tragedia. Buena noticia esta. Cada país es entonces responsable de definir su propio destino. Y por ende sigue siendo el último responsable de su propio éxito o fracaso.

sábado, 31 de mayo de 2008

Multilaterales y Farándula

(La Patria, Seccion Negocios, 9 de Junio 2008)
Cuando artistas multimillonarios se unen a causas sociales, es difícil interpretar la verdad detrás de los hechos. Para los críticos, la “pose” social de los artistas es una mera estrategia publicitaria. Para los optimistas, los artistas son el mejor vehículo para generar conciencia social respecto de temas sociales complicados como la pobreza, el medio ambiente y el SIDA.

La utilización de cantantes y otros personajes famosos, actores y deportistas particularmente, por parte de organizaciones internacionales como Naciones Unidas no es nueva. Así como tampoco lo son las fundaciones que llevan sus nombres o las campañas “sociales” de empresas privadas, en las cuales los consumidores pagan un sobreprecio que luego será donado a causas sociales.

Lo que si parece nuevo es la alianza de la Banca Multilateral y la farándula. Juanes, Shakira, Ricky Martin, Juan Luis Guerra, Alejandro Sanz y Luis Alberto Moreno (el Presidente del BID) lanzaron la campaña “Yo Amo América” en la pasada Asamblea de Gobernadores del BID. La campaña esta dirigida a impulsar programas públicos de atención integral temprana para los recién nacidos de escasos recursos en los países latinoamericanos.

La Fundación ALAS a la que pertenecen estos artistas y otros famosos latinoamericanos, nació sobre la base del trabajo académico, serio e informado de un grupo de expertos reunidos en lo que se denominó la Mesa Redonda de San José. El panel de expertos trató y evaluó, durante tres días seguidos en octubre de 2007, los diez desafíos y las diversas soluciones y oportunidades presentadas para resolverlos. Al final del ejercicio los expertos clasificaron las soluciones y oportunidades balanceando sus correspondientes costos y beneficios sociales y monetarios. La política ganadora, es decir aquella que rinde los mayores beneficios sociales al menor costo financiero fue la de “Desarrollo Infantil Temprano”.

Esperemos que esta nueva alianza logre sus propósitos. Siempre he creído que lo mejor que tienen las multilaterales, su capital humano y su capacidad de generar conocimiento, es lo que menos exportan. Si no como lo afirma la critica hecha por Alejandro Gaviria quizás estemos presenciando “un punto de inflexión en la historia de las multilaterales, una aceptación implícita de que su papel es más simbólico que real, de que su labor consiste en mantener, como dijo Albert Hirschman, un sesgo por la esperanza después del derrumbe de las utopías del desarrollo”.

lunes, 12 de mayo de 2008

Restricciones vehiculares: funcionan?

(La Patria, Seccion Negocios, Lunes 19 de Mayo, 2008)
El 15 de julio del presente se cumplen diez años de la instauración de la primera política pública de restricción de circulación para vehículos particulares en Colombia. El famoso “Pico y placa” empezó en Bogotá gracias a las recomendaciones del estudio "Plan Maestro de Transporte Urbano para Bogotá" realizado por la Agencia de Cooperación Japonesa (JICA) en 1996. Como consecuencia de su aparente éxito, la medida se ha expandido a otras ciudades del país.

La racionalidad de esta política se basa en las externalidades negativas (costos sociales) que los vehículos particulares imponen sobre la sociedad. Entre ellos los dos más importantes son la reducción en los tiempos de desplazamiento y el empeoramiento de la calidad del aire. Más tiempo en desplazamiento significa menor productividad laboral y/o menor disfrute del tiempo personal. Mientras que una mala calidad del aire significa mayores problemas de salud, con las consiguientes pérdidas en calidad de vida y productividad.

En su decimo aniversario, vale la pena preguntarse que tanto han logrado estas medidas en el país y por ende que ajustes deben hacerse. A nivel doméstico, existe un estudio (tesis de pregrado) de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Javeriana, publicado en 2005, y en éste se concluye que el pico y placa ha sido efectivo para Bogotá en términos de disminución de tráfico vehicular pero dada la baja calidad de la información se abstiene de ser conclusivo en términos de calidad del aire.

A nivel internacional quizá el estudio más riguroso es el de Lucas W. Davis, economista de la Universidad de Michigan, quien estudio el programa “Hoy no circula” de Ciudad de México. Los resultados no son muy halagadores para este tipo de medidas. Davis encontró que no existe evidencia de que el programa haya mejorado la calidad del aire, por el contrario la contaminación se incrementó en las noches y en los fínes de semana, respecto del período antes de la medida. Davis concluye que los afectados por la medida simplemente sustituyeron el horario de uso de sus vehículos, en lugar de disminuirlo, como era el objetivo de la medida.

De hecho, Davis encontró que el consumo de gasolina no cambio significativamente como tampoco el uso de sistemas de transporte masivo. Por el contrario la evidencia empírica sugiere un incremento en el número de vehículos en circulación al igual que cambios en la composición del parque automotor hacia vehículos más contaminantes. En otras palabras, la respuesta de los propietarios de vehículos que resultaron afectados fue comprar un segundo vehículo, seguramente más viejo y más contaminante.

No cabe duda que las políticas estilo “pico y placa” son antipáticas, y si a esto se le agregan las dudas sobre su eficacia, su beneficio social neto es seguramente negativo. Un instrumento más directo para lograr los beneficios esperados es elevar los impuestos a la gasolina y mejorar la disponibilidad y seguridad del transporte público. Afortunadamente no se necesitara un decreto o una amplia discusión al respecto, las condiciones actuales y futuras de los precios de la gasolina seguramente harán el milagro.

viernes, 21 de marzo de 2008

Economía vs. Comunidad?

(La Patria, Negocios, 3 de Junio 2008)
Stephen Marglin, profesor de la facultad de Economía de Harvard, nos invita a reflexionar en su mas reciente libro (The Dismal Science: How Thinking Like an Economist Undermines Community) acerca de la responsabilidad que tendría la teoría económica en el debilitamiento de la piedra angular de toda sociedad: sus comunidades.

El profesor Marglin argumenta que la teoría económica olvidó incluir el concepto de comunidad entre sus principios y se concentró en el individuo. El capitalismo según su argumento debilita las comunidades por dos vías. Por una parte están la especialización y la globalización que nos permiten y nos invitan a comprar bienes y servicios que no sabemos donde ni quienes los hacen pero que resultan mas baratos. Y por otra, la movilidad. Su argumento en este sentido radica en los costos sociales que los migrantes (nacionales e internacionales) imponen sobre si mismos y sobre su comunidad cuando migran en busca de maximizar ingreso.

Para el autor los mercados deben ser sujetos a escrutinio por los costos que imponen sobre las comunidades. La pregunta obvia es quien esta capacitado para hacer este escrutinio, y la respuesta obvia es: no sabemos, pero es hora de comenzar a discutirlo.

El libro de Marglin retoma el eterno debate entre eficiencia y equidad. La teoría económica propende por la eficiencia, producir más minimizando el uso de recursos y maximizando utilidad para los individuos y ganancias para las firmas. El análisis económico es claro en aconsejar como alcanzar estos objetivos, pero se abstiene cuando se trata de tomar posición respecto de cómo distribuir los bienes y servicios producidos. Este es un juicio de valor, dice la economía, que las matemáticas no pueden resolver y son las sociedades y sus comunidades las que deben decidir.

Las críticas de Marglin sobre los mercados y su efecto sobre las comunidades no son nuevas. Todo lo que se escribe en contra del capitalismo usa de una u otra manera este argumento. Lo nuevo y verdaderamente interesante es el movimiento que se esta generando en las escuelas de economía por devolverle el lugar perdido a “la equidad” como objetivo fundamental en el desarrollo.

Quizás la complejidad de los problemas que aquejan al mundo desarrollado: cambio climático, terrorismo, detección tardía de efectos nocivos para la salud de bienes y servicios que se comercializan libremente, recesión económica, presiones migratorias, costos crecientes de los servicios de salud, etc; lleven a replantear los modelos de desarrollo económico basados solo en mercados que hoy son usados en textos universitarios y como dogma en las entidades internacionales.

Ojala que no este muy lejano el día en que los libros de texto de economía pidan a sus estudiantes lo siguiente: “maximicé la siguiente función de utilidad de una comunidad sujeto a las siguientes restricciones de presupuesto y equidad.”

domingo, 9 de marzo de 2008

Crisis y Economía

Parece difícil de creer que después de una semana de alta tensión, con comentarios, acusaciones y amenazas cruzadas entre cuatro países, la denominada “mayor crisis diplomática de Colombia” haya sido superada. Cuesta creer que después de una agitada reunión de emergencia en la OEA al comienzo de la semana, solo cuatro días después las manos se aprieten y se promulgue a viva voz que todo esta superado.

No quiero menospreciar el dialogo como herramienta de resolución de conflictos. Pero tampoco creo que este haya sido el mejor ejemplo de ello, en especial, dado el cruce y el calibre de las declaraciones previas de cada uno de los presidentes, y la conocida capacidad negociadora del principal agitador de la misma: el Presidente Chavez.

Tampoco creo que esto haya sido un montaje de medios o una cortina de humo. El hecho que provoco la crisis es real: el asesinato de un terrorista colombiano por parte de fuerzas colombianas en un país extranjero.

Así las cosas al menos dos hipótesis pueden esbozarse como las razones que explican la rapidísima resolución del conflicto. La primera: políticamente todos los involucrados tienen rabo de paja. Todas las acusaciones, hasta cierto punto, eran validas. Entonces después de pensarlo con cabeza fría los presidentes en su sabiduría decidieron no lavar la ropa sucia en frente de la comunidad internacional.

La segunda razón es la economía. A la base de cualquier negocio, en un mercado libre, esta es la noción de que cada una de las partes se esta favoreciendo con el intercambio. Tiene sentido entonces pensar que la economía jugó un papel importante. Para que arriesgar flujos comerciales de US$ 5.000 millones (Colombia-Venezuela) y US$3.500 (Colombia-Ecuador) si el problema que ocasionó el conflicto no tiene nada que ver con los colombianos, ecuatorianos y venezolanos de bien. No es descabellado pensar que los grandes empresarios y asociaciones comerciales de cada país, quienes a su vez son los grandes financiadores de las campañas presidenciales, “aconsejaron” a sus presidentes bajar el tono y no entorpecer el buen ritmo de los negocios.

En fin, no cabe duda que el gran ganador de toda esta semana es Colombia. Tiene un terrorista menos amenazándola, ha asestado un gran golpe a su más enconado enemigo y logro minimizar las consecuencias económicas de su acción. Pero la gran perdedora de la semana es la verdad: si ningún organismo internacional investiga a profundidad los nexos de la guerrilla con dirigentes extranjeros, jamás sabremos a ciencia cierta el tamaño del (los) enemigo(s) de la paz en Colombia.

domingo, 10 de febrero de 2008

Financiar a Antanas

(La Patria, 2 de Marzo de 2008)
La gran marcha en contra de las FARC del pasado 4 de Febrero fue un acto de gran contenido simbólico. Miles de colombianos caminaron en cientos de ciudades pidiendo a una sola voz “No Mas Secuestros, No Mas Mentiras, No Mas Muertes, No Mas FARC”. El hecho es bastante diciente pero difícil de capitalizar.

No hay duda que la sociedad esta cansada de los secuestros, las mentiras y demás demonios que nos aquejan, quien no? Las acciones colectivas por intangibles dejan una desagradable sensación de impotencia y peor aun “insospechados” réditos políticos. Será que las FARC dejaran de secuestrar, o los narcotraficantes de financiar la guerra, o los políticos de decir mentiras, o los poseedores de armas de asesinar, lo dudo. Esta no es la primera marcha que el país ha visto, y los problemas siguen ahí.

Excelente la propuesta de Antanas Mockus de aprovechar esta energía y este entusiasmo en logros tangibles. Su propuesta de un rescate civil de secuestrados es intachable: “Ciento cincuenta años después de la abolición de la esclavitud en Colombia hay que construir una cadena fuerte de voluntades humanas para liberar a compatriotas que hoy sufren algo peor que la esclavitud.”

Antanas tiene en sus manos una oportunidad de oro y los colombianos que marcharon una oportunidad única de ver su sueño realidad. Como? Financiando la iniciativa. Por ejemplo asumiendo que marcharon 1 millón de personas (sabemos que fueron muchas mas), si cada una dona como mínimo 1,000 pesos, se recogerían no menos de 1,000 millones de pesos. Una cifra más que suficiente para financiar la salud y la alimentación de este grupo civil. Estos dineros deben ser manejados por una entidad internacional y tanto los ingresos como los gastos ser plenamente públicos. Una entidad internacional también debe entregar en especie los alimentos y los servicios de salud a estas personas.

Además de la verificación internacional es clave que la financiación de la iniciativa sea solo de la sociedad civil. Ni el gobierno, ni los partidos políticos, pueden ser asociados con esta actividad.

Financiar la acción civil de Antanas Mockus es la mejor muestra de compromiso de la sociedad hacia la sociedad misma.

sábado, 9 de febrero de 2008

Promover el bilingüismo

(La Patria, 10 de Marzo 2008; El Mundo, Octubre 7 de 2008)
Una preocupante noticia paso inadvertida en días pasados: “Solo un uno por ciento de los estudiantes evaluados en el pasado ICFES supera niveles de conocimiento aceptables en el idioma Ingles”. En economías cada vez más globalizadas y a las puertas de tratados comerciales internacionales la carencia de un segundo idioma, y en particular del Ingles, es una limitación más que la fuerza laboral colombiana pagará con menores salarios.

La brecha de salarios entre la mano de obra no calificada y calificada es una de las razones que explican la desigualdad en el ingreso y por allí la pobreza. Esta es además una de las razones por las cuales las economías pueden crecer vigorosamente sin que los indicadores de pobreza y desigualdad cambien. El caso de Colombia es un excelente ejemplo de ello.

No conozco estudios que hayan estimado rigurosamente el diferencial de ingresos entre individuos con y sin una segunda lengua en Colombia, pero no parece descabellado pensar que los retornos de aquellos que son bilingües sean mayores. La carencia de un segundo idioma es sin duda una de las características que perpetúan la desigualdad social.

Pero si la noticia es preocupante, no menos es la respuesta de política pública. Decía la misma noticia que el SENA creo un programa gratuito de ingles para todos los colombianos que sepan leer y escribir y que tengan acceso a un computador con Internet. Suena bien, el 93% de los adultos colombianos saben leer y escribir. Lastimosamente la iniciativa se desmorona cuando tenemos en cuenta otro dato: solo el 10% de los colombianos tienen acceso a Internet (a 2005 según los indicadores de desarrollo mundial del Banco Mundial). Una buena idea pero un mal medio.

Los resultados del ICFES demuestran otra cosa aun más crítica, la mera inclusión de la enseñanza de una segunda lengua en los currículos escolares ha fracasado. Es bien sabido que cualquier conocimiento se apropia solo mediante la motivación individual y la aplicación de la información recibida en situaciones cotidianas, o a través de la ingrata pero efectiva repetición.

Es posible motivar, acercar y familiarizar a los colombianos a un segundo idioma por otros medios. La dirección adecuada de una política publica en esta materia es construir sobre los medios (92% de los hogares tienen televisor) y sobre los contenidos que los colombianos ya consumen en Ingles (televisión y cine). El rango es amplio, desde la promoción de programas bilingües para todas las edades y en todos los horarios, hasta respetar los títulos en ingles de las películas de cine o televisión y a partir de allí de manera didáctica ampliar el vocabulario y el entendimiento contextual y gramatical de esta segunda lengua.

lunes, 28 de enero de 2008

Y Ud. a quien esta subsidiando?

(La Patria, 25 de Febrero de 2008)
No existe algo mas aborrecido por la teoría económica y mas amado por los políticos que los subsidios. Para los políticos son la mejor herramienta de populismo y el mejor mecanismo para devolver favores. Para los economistas, los subsidios son el peor enemigo de los mercados, no solo porque distorsionan las decisiones de los agentes que en el transan, sino porque casi siempre terminan en las manos de quienes no los necesitan.

Los subsidios a los servicios públicos en Colombia son un buen ejemplo de esto. En efecto, en la mas reciente edición de la Revista de la Sociedad de Economistas de Latino América y del Caribe (LACEA) se encuentra publicado un interesante análisis que demuestra las limitaciones de dichos subsidios como herramienta de lucha contra la pobreza. Los autores, Carlos Medina y Leonardo Morales, se plantean la siguiente pregunta: que tanto de estos subsidios va a los bolsillos de las familias que viven en los estratos subsidiados (el objetivo de la política) y que tanto se transfiere a los dueños de las viviendas beneficiadas?

Como es bien sabido, el sistema de subsidios imperante en Colombia esta diseñado de tal forma que los estratos altos (5 y 6) y los sectores comercial y empresarial pagan un sobre precio y con este dinero se subsidia parte del consumo de los hogares de estratos bajos. Esta política es costosa e ineficiente.

Costosa porque el valor total del subsidio llega a ser 0.7% del PIB según los autores, unos 3 billones de pesos de 2007 a mano alzada. Dinero que es pagado por los contribuyentes bien sea a través del sobre precio o de impuestos. Según estimaciones de estos autores 0.4% del PIB se financia via sobreprecios y 0.3% del PIB via presupuesto del gobierno.

Ineficiente porque el subsidio se esta yendo a manos de los dueños de las viviendas. Medina y Morales, usando datos para Bogotá, encuentran que el incremento en el precio de la vivienda en estratos subsidiados es similar en magnitud al valor presente del flujo de los subsidios; y el mismo efecto se aprecia en los arrendamientos. Es decir que aquellos que viven en estratos bajos pagan más en arrendamiento o más en cuotas hipotecarias de lo que pagarían si el mercado no estuviera distorsionado. Ese mayor valor que están pagando se va directamente a los dueños de las viviendas (si son arrendatarios) o a los que se las vendieron (constructores, antiguos propietarios y sistema financiero).

El análisis de Medina y Morales sugiere una revisión al sistema de subsidios cruzados como política de alivio a la pobreza. De hecho un análisis posterior de los mismos autores sugiere que el país se ahorraría unos 33 millones de dólares eliminando el sistema de estratificación socioeconómica y pasándose a uno que pondere las necesidades individuales tipo SISBEN. Cuando dejaremos de beneficiar a quien no lo necesita?

miércoles, 23 de enero de 2008

Consumir con responsabilidad social

(Publicada el 18 de Febrero de 2008 en La Patria)

Decía una nota de tecnología publicada semanas atrás que “Sistemas que permiten a las personas controlar fácilmente el consumo de energía de los electrodomésticos, sensores para identificar con exactitud la composición de los alimentos que se van a consumir … hacen parte de las innovaciones que más impacto tendrán en la vida diaria durante los próximos cinco años”. Esta afirmación proviene de un grupo de investigadores de la empresa IBM que en asocio con entidades científicas como el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) y la Nasa, identificó las cinco principales tendencias tecnológicas del próximo lustro.

La ventaja de esta tecnología llamada RFID es que las personas sabrán exactamente qué compran pues los productos no se identificarán por códigos de barras, sino que incluirán chips con la información de los mismos. Así aparatos que están hoy al alcance de todos como un celular podrán incorporar lectores de RFID para que usted conozca información hasta ahora desconocida acerca de lo que consume.

Sin embargo la verdadera promesa de esta tecnología esta en su capacidad de movilizar grandes recursos de unos mercados a otros a través del empoderamiento de los consumidores y quizás resolver de una buena vez problemas sociales que parecen imposibles de atacar. Hasta ahora las tecnologías de la información han sido utilizadas tímidamente en la política social. Pero esta tecnología podría revolucionar los mercados haciéndolos mas pro-pobre o mas pro-igualdad.

Cómo? Imagine por un instante que usted esta enfrente de un producto que va a comprar y que tiene diferentes marcas para escoger. Además de verificar visualmente y leer la información básica de la etiqueta, usted podría tener acceso a otra información que es revelante socialmente hablando, tal como: el ingreso del empleado peor y mejor pagado de esta compañía, la proporción de mujeres a hombres en cargos administrativos y operativos, el tipo de contratación imperante en tal empresa, el porcentaje de empleados que tienen seguridad social completa, el numero de empleados mayores de cierta edad, el valor de los impuestos pagados al fisco en los últimos años, o en general cualquier otra información relevante para usted y su posición respecto de ciertos problemas que aquejan a la sociedad actual como la discriminación por edad, sexo o raza y la amplia inequidad en la distribución del ingreso.

El vasto crecimiento de los mercados de productos orgánicos o de los productos saludables es una muestra fehaciente del potencial que una iniciativa como esta tendría. Los consumidores son la fuerza más poderosa de cualquier economía (70% del PIB) y son sus decisiones las que finalmente determinan que pasa en los mercados y hacia donde se dirigen los recursos productivos. Tecnología y políticas públicas que exijan completa información de los productores a los consumidores pueden ser el eslabón perdido en la incesante búsqueda de acabar con la pobreza y la desigualdad.

miércoles, 16 de enero de 2008

Copagos: no siempre son eficientes

(La Patria, Lunes 14 de Abril de 2008)
La teoría económica y sus principios sostienen que para prevenir la demanda excesiva por bienes o servicios, y por ende evitar que estos se desperdicien o que sean utilizados de manera excesiva e innecesaria por quienes no los necesitan, se debe cobrar un precio positivo así este sea subsidiado. Esta es la racionalidad detrás de los “copagos” existentes en nuestro sistema de salud.

Por años, principios como este se han asentado como verdades absolutas, como axiomas irrefutables, sirviendo además de base para el diseño de políticas públicas. De hecho, cualquier profesor de economía o cualquier libro de texto tildaría de equivocado a quien sostuviera que un precio cero no lleva al sobreconsumo. Las cosas sin embargo no son tan fáciles, felizmente un creciente numero de académicos están actualmente retando importantes principios de la teoría económica.

En efecto, se abren paso cada vez con mayor fuerza en la literatura internacional investigaciones encaminadas a evaluar la efectividad de mecanismos específicos incluidos en las políticas públicas. Estos estudios usan en su mayoría métodos experimentales, lo cual les da el rigor necesario para retar hasta los más ortodoxos economistas y principios económicos. Es de aclarar, sin embargo, que los métodos experimentales tienen ciertas limitaciones a la hora de generalizar sus resultados.

Uno de estos nuevos estudios, conducido por los economistas Cohen y Dupas del Brookings Intitute, rechaza el principio de que los “copagos” son eficientes y que la alternativa a estos, léase la distribución gratuita no lo es. Aplicando técnicas experimentales, los autores encuentran que no existe evidencia de que cobrar un precio positivo por redes tratadas con insecticidas para prevenir la malaria, vendidas a mujeres embarazadas en una zona particular de Kenya, sea un mecanismo eficiente para prevenir la sobre utilización o para auto seleccionar a aquellas que mas las necesitan. Por el contrario el estudio encuentra que incrementos en los precios disminuyen la demanda por las mismas induciendo un mayor riesgo de malaria, es decir, logrando exactamente aquello que la política publica “anti-malaria” quiere evitar.

Estudios como estos son importantes llamados de atención a nuestras políticas publicas de salud. No es descabellado pensar que un buen numero de colombianos pobres y de clase media encuentre en los copagos una barrera y un desincentivo para utilizar bienes y servicios médicos, especialmente cuando estos se suman a otros costos de transacción en los que tiene que incurrir a la hora de utilizar los servicios médicos, tales como los costos de transporte y el costo de oportunidad laboral o personal del tiempo invertido en visitar un medico o un centro de salud. Revisar la política de copagos en ciertos bienes y servicios médicos puede ser una buena idea ahora que los nuevos secretarios de salud empiezan sus periodos de gobierno.

lunes, 7 de enero de 2008

La ilusión de los técnicos

Es época de nuevos gobernantes locales y con ellos de nuevos gabinetes. Con los nuevos gabinetes comienzan también los escrutinios a los individuos elegidos por cada alcalde y gobernador. Con cierta simpleza dichos análisis tienden a dividir los nuevos secretarios entre “técnicos” y “políticos”, asumiendo que los primeros tomaran decisiones buenas y objetivas y los segundos no. La realidad de los procesos y de las decisiones en política pública es sin embargo más compleja demostrando a la larga que las ventajas de los técnicos suelen diluirse rápidamente.

En primer lugar aunque a primera vista un “técnico” ofrece la garantía de tomar decisiones basado en los fundamentos teóricos y empíricos de su respectiva área de estudio o experiencia, lo que a menudo se olvida es que en las ciencias sociales, no existe teoría libre de ideología, ni tampoco teoría libre de supuestos. Basta con observar, por ejemplo, la eterna disputa entre las teorías económicas que propenden por el libre mercado y las que defienden un mayor intervencionismo estatal. Cada escuela teórica defiende una posición política, un juicio de valor.

Pero el asunto no es solo teórico, también es empírico. El tiempo y los recursos que se necesitan para consolidar ejercicios técnicos rigurosos es un lujo que los gobiernos en general no tienen. Esto impide en la mayoría de los casos que las decisiones se tomen con la información adecuada, sin contar con otras dificultades comunes a las aproximaciones empíricas como la calidad de la información y el acceso intra e inter gubernamental a la misma (recordemos el caso DANE vs DNP). La falta de información deja al “técnico” sin su herramienta más importante.

En tercer lugar, una vez en el cargo los técnicos suelen enfrentar la realidad y muchas veces sacrifican la técnica por la conveniencia. Y sí no, cómo explicar que el impuesto más anti-técnico (gravamen a los movimientos financieros) no haya sido desmontado aun después de que el país ha tenido brillantes técnicos como Ministros de Hacienda.

Por último, debe reconocerse el poco valor que tiene la técnica en nuestro sistema de decisiones de política, y en las democracias en general, en el cual es el número de votos en concejos y asambleas y no el análisis técnico el que prima. El sistema simplemente privilegia la negociación y la persuasión sobre la técnica, habilidades en las que la mayoría de los técnicos no son muy buenos. Irónicamente para que un técnico sea exitoso en la gestión pública debe ser un buen político.

Es preciso entonces ser cauteloso y no ilusionarse con las supuestas maravillas de los gabinetes técnicos. La buena noticia de los “técnicos” es que en su mayoría llegan a ejercer sus cargos sin pasados políticos o legales cuestionables. La mala es que muchos terminan naufragando ante las poderosas fuerzas de los intereses económicos que dominan las decisiones de política pública.